La presencia del café en la oficina es algo habitual en muchas empresas, y no se debe solo a que se trate de una costumbre, sino a que esta bebida tiene una gran cantidad de beneficios para el organismo y también a nivel laboral.

El café en la oficina: ¿costumbre o necesidad?

Hay quien no puede arrancar su jornada laboral si no se toma antes un café, también hay quien prefiere dejar esta bebida para media mañana, mientras hace un pequeño descanso en su trabajo. Esto nos lleva a plantearnos si tomar un café es una necesidad de nuestro organismo o más bien una costumbre, también necesaria a otros niveles.

Es cierto que la cafeína nos ayuda a espabilarnos, pero no es necesaria para nuestro cuerpo. Aunque muchos digan eso de “no puedo hacer nada si antes no me tomo un café”, sabemos que es falso. Nos levantamos con sueño, pero a media que vamos haciendo cosas, nuestro cerebro y nuestro cuerpo se activan, acabando con la sensación de somnolencia.

Al final, lo que nos despierta no es la taza de café que nos tomamos, sino lo que hemos hecho mientras tanto: preparar la cafetera, encontrarnos con los compañeros, desconectar del trabajo por unos minutos, etc.

A muchos empleados les da la sensación de que necesitan tomarse un café para poder afrontar las tareas del día, pero podrían hacerlas igual sin él. Lo que pasa, es que ha adoptado esa costumbre.

Y no es malo generar esa costumbre, porque así desarrollamos una rutina que interiorizamos y consigue que nuestro día a día en el trabajo sea más llevadero. El simple hecho de saber que se hará una parada a las 11 de la mañana para tomar esta bebida, hace que los empleados afronten con mejor ánimo las primeras horas de la jornada.

Beneficios de tener café en la oficina para tus empleados

La cafetería de una oficina se ha convertido en todo un clásico. Un pequeño espacio al que los empleados pueden acudir para servirse un café, incluso picar algo, y descansar durante unos minutos.

Lejos de ser una pérdida de tiempo, la pausa para el café ha demostrado tener efectos muy beneficiosos para los empleados y para la empresa.

Potencia la socialización

Lo habitual es que los empleados se relacionen más con las personas de su departamento, ya que son con las que pasan más horas cada día. Sin embargo, a la zona de cafetería en la oficina acuden todos los empleados.

De esta forma, ese espacio se convierte en un área de socialización. Un lugar que potencia las relaciones interpersonales, haciendo que se genere un mejor ambiente de trabajo.

Ayuda a la productividad

No es necesariamente más productivo el empleado que pasa horas y horas en su escritorio sin moverse. Es más, todos los expertos recomiendan tomar un descanso en el trabajo después de cierto tiempo.

Al hacerlo, el cerebro se oxigena. Si, además, durante ese pequeño descanso, se toma una bebida estimulante y se charla con otras personas, el resultado es que, cuando el trabajador vuelve a su puesto, lo hace de mejor ánimo, más motivado y más descansado. En consecuencia, es más productivo.

Evita las pérdidas de tiempo

En torno al café en la oficina hay todo un ritual. Hay quien hace siempre el descanso a la misma hora y pasa unos minutos cerca de la máquina de café charlando con los compañeros que encuentre por ahí. También hay quien está muy concentrado en su trabajo y acude a la máquina a por un café, pero se lleva su bebida a su escritorio porque ese día no puede perder nada de tiempo.

Por el contrario, si no tenemos café a disposición de nuestros empleados, la rutina cambia y se alarga. Incluso el empleado que solo quiere coger un café y tomarlo en su escritorio, tardará varios minutos en ir y volver. Por su parte, el trabajador que se toma un descanso, acabará pasando fuera una media de 20 minutos si tiene que ir y volver a una cafetería.

De esta forma, si ponemos café a disposición de nuestros empleados, estos disfrutarán de los beneficios que hemos ido señalando y, además, no habrá pérdidas innecesarias de tiempo dentro de la jornada laboral.

Aumenta el compromiso laboral

Instalar una máquina de café en la oficina implica que el empleador se preocupa por el bienestar de sus empleados y así lo perciben ellos. Esto da lugar a una mayor satisfacción con la empresa, lo que aumenta el compromiso laboral.

El café en la oficina es algo habitual en nuestra cultura y, como acabas de comprobar, tiene beneficios a muchos niveles, siendo capaz incluso de mejorar el rendimiento de los empleados. Si quieres comprobar de primera mano todas las ventajas de poner café a disposición de tu plantilla, solo tienes que instalar una máquina dispensadora en la zona de descanso. Cuenta con nosotros si quieres mejorar el clima laboral de una forma sencilla y práctica.

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