Aunque solemos referirnos a la hostelería como un único sector, lo cierto es que dentro de ella nos encontramos con una amplia variedad de ideas de negocio, porque existen diferentes tipos de negocios de hostelería. Es conveniente estar al tanto de esta tipología para tomar buenas decisiones cuando estamos pensando en emprender.
Por ejemplo, disponer de un bar cafetería o cualquier otro local de hostelería nos obliga ha estar al día en los diferentes tipos de licencia nacional o de las comunidades autónomas. Así que los diferentes tipos de actividades como establecimientos de restaurantes, bares restaurantes y cafeterías tienes sus peculiaridades.
- Los distintos tipos de negocios de hostelería
- Hoteles
- Servicio de catering
- Restaurantes
- Cafeterías
- Bares
- Bares de copas y discotecas
Los distintos tipos de negocios de hostelería
Como hemos dicho antes, existen diversos tipos de negocios en el sector de la hostelería, por lo que es importante conocer sus características para ver cuál se ajusta más a nuestras necesidades.
Hoteles
Un hotel es un establecimiento de hostelería dedicado de forma profesional a dar alojamiento, a cambio de un precio, a las personas. El servicio básico es la pernoctación, pero se puede complementar con servicios adicionales como el de restaurante, tintorería, peluquería, etc.
De un tiempo a esta parte, se están popularizando los hoteles que ofrecen también servicio de spa, al que pueden acceder tanto los huéspedes como los que no lo son.
Algunos hoteles siguen buscando alternativas para diversificar su negocio a través de la captación de clientes que no son propiamente huéspedes. Por ejemplo, convirtiendo a los habitantes de la ciudad (que seguramente no necesitarán pernoctar en el hotel) en clientes de su servicio de bar o restaurante, o incluso de su piscina.
Dentro de este sector se está evolucionando hacia modelos de negocio más pequeños, como los hoteles boutique o los alojamientos rurales.
Servicio de catering
El catering es un servicio especializado en la elaboración de platos, con la particularidad de que no se sirven en un establecimiento propio. La empresa prepara la comida y luego la pone a disposición de sus clientes, que pueden ser restaurantes, comedores de empresas o colegios y particulares.
Cuando el servicio de catering se presta a clientes particulares, es habitual que la empresa ofrezca también todo el servicio necesario para dar de comer a varias personas: montaje de mesas, servicio de camareros, recogida del menaje y el mobiliario, etc.
Restaurantes
Un restaurante es un establecimiento abierto al público al que acuden los clientes para degustar diferentes platos, ya sea en versión menú o a la carta.
En un restaurante de corte tradicional los platos serán servidos en la mesa por un camarero, pero también hay bufets en los que los comensales tienen a su disposición la comida en unos expositores y se la pueden servir libremente.
Muchos restaurantes han evolucionado su negocio con el servicio de comida a domicilio. Esto les permite multiplicar el número de clientes a los que pueden atender en un mismo turno de comidas, sin necesidad de ampliar el establecimiento.
De hecho, en los últimos años han empezado a surgir los que se conocen como restaurantes fantasma. Negocios centrados únicamente en la comida a domicilio, que no cuentan con un establecimiento abierto al público.
Cafeterías
La cafetería es un establecimiento comercial abierto al público en el que se sirven bebidas, generalmente no alcohólicas, y platos que no requieren de una elaboración compleja. Por ejemplo, tapas o bocadillos.
Lo habitual es que la cafetería no tenga servicio de barra, ya que esto es algo propio de un bar. Lo que sí que tienen algunas cafeterías es un servicio de terraza.
Como en otros tipos de negocios de hostelería, las cafeterías también han buscado otras alternativas para aumentar sus ingresos. Por ejemplo, potenciando la permanencia de los clientes en el establecimiento ofreciéndoles wifi gratis, u organizando exposiciones, conferencias, y hasta pequeños talleres formativos.
Bares
Montar un bar es una de las ideas de negocio de hostelería más habituales. Un bar es un establecimiento abierto al público en el que se sirven bebidas, incluyendo bebidas alcohólicas, en barra, mesa y terraza.
Lo habitual es que cuente también con una pequeña carta de platos de elaboración sencilla, como bocadillos calientes o raciones.
En este negocio también es posible explorar otras alternativas dentro del propio establecimiento para incrementar los ingresos. Una opción bastante común y rentable es la instalación de máquinas recreativas. No solo prolongan el tiempo de permanencia de los clientes en el bar y aumentan su consumo, sino que, en sí mismas, también son un elemento que ayuda a obtener más ingresos. Por este motivo, si estás pensando en montar una máquina recreativa en tu bar, ponte en contacto con nosotros y, desde AMIGRUP, te ayudaremos con asesoramiento especializado.
Otras alternativas clásicas para potenciar la rentabilidad de este tipo de negocios son retransmitir los partidos de fútbol, o ampliar la carta de restauración con comida rápida tipo hamburguesas o pizzas.
El bar también tiene a su disposición la opción de hacer envíos de comida a domicilio. Si no puede contar con un repartidor propio, puede utilizar las plataformas que operan a través de riders.
Bares de copas y discotecas
Aunque están más cercanos al sector de ocio, lo cierto es que también forman parte del gremio de la hostelería. Hasta ahora se diferenciaban de otros tipos de bares por el hecho de centrar su actividad en la dispensación de bebidas, generalmente alcohólicas, pero cada vez es más común que estos establecimientos ofrezcan servicios complementarios, como el de restaurante, o que funcionen como salas de conciertos.
Hay muchos tipos de negocios de hostelería, y lo bueno es que todos ellos disponen de opciones para seguir aumentando su rentabilidad más allá de su actividad principal. De ahí que estemos ante uno de los sectores más atractivos para los emprendedores.